En la actualidad ya no queda duda de que la vida rural ofrece cada vez más ventajas frente al hecho de vivir en las grandes ciudades. En estos lugares se disfruta de grandes beneficios, como, por ejemplo, respirar aire limpio y puro, o pasear por un entorno tranquilo y sano libre de los ruidos estresantes del tráfico de las grandes urbes. A esto se suma la posibilidad de tener contacto directo con la naturaleza y el hecho de que el estilo de vida es mucho más reposado y libre del típico ajetreo y de la vida frenética de las grandes ciudades
Ahora más que nunca, ante la emergencia climática y el calentamiento global, muchas personas han empezado a optar por un estilo de vida más sostenible que nos acerca a la naturaleza. Esto es, además, beneficioso para la salud, ya que podemos alimentarnos de una manera mucho más saludable, sin consumir productos cargados de aditivos y conservantes. Vivir en el pueblo nos da un mayor acceso a los huertos con productos orgánicos donde comprar.
Estos son algunos de los motivos principales por los que muchas personas vivían en las grandes ciudades han optado por llevar un estilo de vida rural tranquilo y libre de estrés. Esta elección suele contar con muchos beneficios físicos y mentales, ya que está demostrado que el contacto con la naturaleza es indispensable para mejorar nuestro estado de ánimo.
Lo mismo ocurre con la educación de los más pequeños de la casa, ya que en estos entornos de campo pueden tener acceso a un aprendizaje mucho más completo y realista, en contacto directo con el medio ambiente. Por ello, en este artículo te vamos a explicar las ventajas principales de los colegios públicos rurales.
Ambiente cercano y acogedor
Los colegios públicos rurales tienen la principal ventaja de proporcionar a los alumnos y alumnas un ambiente más familiar y cercano del que se puede disfrutar en las grandes ciudades. En las grandes ciudades, muchas veces las relaciones entre los alumnos se diluyen porque las urbes son tan grandes que muchas veces existe bastante distancia entre los hogares de sus padres.
En cambio, en los entornos rurales, esto no ocurre, por lo que permite una interacción mucho más estrecha entre los estudiantes, los docentes y el personal administrativo del propio centro. Los colegios públicos rurales, además, son más pequeños, pero cuentan con instalaciones de primera calidad, ya que están obligados a mantener unos estándares de confort y unos requisitos mínimos para poder proporcionar una educación de calidad con los medios necesarios.
Del mismo modo, al encontrarse los alumnos en el entorno rural, están en contacto mucho más estrecho con la naturaleza. Esto es indispensable para que las nuevas generaciones valoren la naturaleza y lograr avances en la lucha contra el cambio climático y el calentamiento global. En definitiva, es mucho más fácil concienciar a las nuevas generaciones de alumnos con el objetivo de alcanzar un futuro mejor y mucho más sostenible.
Menor ratio de alumnos por clase
Se trata de uno de los puntos más positivos de los entornos rurales sobre las escuelas ubicadas en entornos urbanos masificados. Debido a que los núcleos rurales suelen ser poblaciones más pequeñas, los colegios públicos que se ubican en ellos suelen contar con una ratio más pequeña de alumnos por clase.
Gracias a ello, un profesor puede estar mucho más atento a la evolución de cada uno de los alumnos, ya que, en ocasiones hay menos de doce estudiantes por aula. Esto es muy positivo, ya que permite proporcionar una atención mucho más individualizada y el seguimiento de cada estudiante por parte del profesorado.
Mayor conexión con la comunidad
Se suele decir que, en los pueblos pequeños, todo el mundo se conoce entre sí. Por este motivo, los colegios que se encuentran en entornos rurales suelen estar vinculados de una manera más estrecha con la comunidad local. Esto es indispensable para que los alumnos sean conscientes de las características y problemáticas que existen en el propio pueblo. Esto es indispensable para favorecer la colaboración y el apoyo entre el centro educativo y las familias, así como la integración de los estudiantes en la vida rural de una manera mucho más rápida y eficiente.
Evitar desplazamientos demasiado lejos
En muchas ciudades, los alumnos deben tomar un autobús escolar o desplazarse hasta el centro educativo para poder beneficiarse de la educación, ya que los colegios públicos suelen quedar bastante lejos. Esto, por supuesto, en los colegios públicos rurales no ocurre, ya que se suelen encontrar bastante cerca del domicilio, como mucho, a 5 o 10 minutos de distancia a pie. Esto es muy cómodo tanto para los padres como para los propios estudiantes, ya que no deben perder el tiempo en desplazamientos innecesarios para ir de casa a la escuela y de la escuela a casa.
Enfoque en la educación integral
La educación en las grandes ciudades suele ser mucho más estandarizada y suele tener un número de variaciones bastante pequeño. Sin embargo, en los colegios públicos rurales a menudo se prioriza una educación integral multidisciplinar, mucho más libre, complementando el aprendizaje académico con una gran variedad de actividades culturales, deportivas y medioambientales. Esto es necesario para que los alumnos y alumnas aprendan mucho más deprisa y de manera concreta todo tipo de actividades que en la ciudad se suelen sentir como algo que no se llega a entender del todo. Asimismo, el aprendizaje es mucho más completo.
Menos problemas de masificación y competitividad
Por último, dentro de las ventajas de los colegios públicos rurales, nos encontramos una cantidad menor de problemas de masificación y de competitividad entre alumnos. Esto se debe, como hemos comentado antes, a que, en estos entornos existe una menor cantidad de estudiantes por aula. Recuerda que en las ciudades existen problemas de masificación y una gran cantidad de alumnos por aula.
Sin embargo, en colegios rurales estos problemas asociados a la masificación y a la competitividad excesiva se diluyen mucho. Por este motivo, en estos entornos se termina promoviendo un ambiente más equitativo y colaborativo dentro del propio proceso educativo, así como que los estudiantes terminan la etapa educativa con un nivel de conocimientos más rico y completo.
En definitiva, podemos decir que los colegios públicos rurales presentan múltiples ventajas que los hacen atractivos para una educación integral y de calidad respecto a los que se ubican en las grandes ciudades. Entre estas ventajas podemos citar su ambiente cercano y acogedor, la atención individualizada con menor ratio de alumnos por clase, la conexión con la comunidad local entre otros. Asimismo, en estos entornos se opta por darle un enfoque a la educación de una manera más integral, complementando lo académico con actividades culturales y medioambientales. Por este motivo, si estás pensando en realizar un erasmus rural, no debes preocuparte por la educación de tus hijos, ya que es de mejor calidad que la que se ofrece en las ciudades.